El clima frío causa estragos en nuestra piel ya que esta se reseca y se vuelve escamosa por la falta de humedad. Además la resequedad suele producir picazón, conocida comúnmente como “comezón de invierno”.
A continuación te dejamos algunos consejos fáciles de seguir para evitar sufrir por la molesta resequedad en invierno.
- Hidrata tu piel diariamente: Incluye siempre una crema hidratante en tu rutina de skincare. Si tienes piel sensible, elige una crema hidratante sin perfumes. Es mejor aplicar la crema hidratante directamente sobre la piel húmeda después del baño para que capture la humedad en la superficie.
- Limpia la piel sin exagerar: Lavar la piel en exceso elimina sus aceites hidratantes naturales. Una vez al día es suficiente para lavar la cara. Las manos debemos lavarlas constantemente debido a la pandemia, por lo que debemos extremar su cuidado con productos hidratantes específicos para manos.
- Limita el uso de agua caliente y jabón: Si ya sufres de “comezón de invierno” puedes tomar duchas o baños tibios cortos con un gel no irritante. Inmediatamente después aplica una crema hidratante masajeando suavemente la piel seca.
- Humedece el ambiente: El aire seco puede afectar la humedad de la piel. Los humidificadores pueden ser útiles pero asegúrate de limpiarlo y cambiar el agua para evitar el moho y los hongos.
- Protégete del viento: Cúbrete la cara y usa un bálsamo para labios a base de vaselina. 7. Protege todo el año tu piel del sol.
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